Twitter es la red social de la inmediatez, de la difusión rápida de los mensajes y su impacto -muy asociado a su uso por líderes de opinión- compensa su menor cantidad de usuarios frente a Facebook. Una de las características principales de Twitter es que cada entrada -denominada tweet (tuit o trino) debe tener un máximo de 140 caracteres, lo que ha forzado a los usuarios a ser concisos y directos en sus mensajes.

Aunque su penetración entre usuarios latinoamericanos no es tan alta como Facebook, a diferencia de la mayoría de las redes sociales Twitter tiene una característica que la destaca, que es la constancia de sus usuarios a lo largo del día. En lugar de entrar una o dos veces desde la computadora, Twitter creció gracias al uso en celulares y al que facilitó el que se generara una enorme batería de herramientas que permiten twittear (tuitear o trinar) desde diversas plataformas, para mantenerse permanentemente conectado.

Su popularidad se dio inicialmente por la posibilidad de conocer, sin intermediarios, el día a día de personajes de la farándula o políticos y fue potenciándose como canal para informarse sobre hechos relevantes, incluso antes de que lo divulguen los medios masivos de comunicación, como en el caso de desastres naturales o protestas ciudadanas que han sido “reportados” por usuarios de Twitter, quienes minuto a minuto contaban desde sus cuentas lo que pasaba a su alrededor. Éste es, en resumen, el gran diferencial de Twitter: la sensación de cercanía y la inmediatez que permite.

Vale la pena destacar que esa cercanía e inmediatez han convertido a Twitter en fuente de los medios de comunicación, siendo de gran atractivo para organizaciones, figuras públicas y políticos: las personas están dejando de ir a los medios para expresar una opinión que sea transmitida a las masas ya que los medios están yendo a Twitter a conocer lo que opina una persona y comunicarlo; además, de esta manera se evitan las interpretaciones ya que lo que dijo la persona está en Twitter, tal cual como lo dijo y al alcance de todos.

Al registrarse en Twitter las personas crean un nombre de usuario, que se caracteriza por estar antecedido de una @, asociado a un perfil de usuario que es público por defecto (a no ser que el usuario restrinja su acceso) y que queda vinculado con una dirección directa (ej., www.twitter.com/nombreelegido), donde puede leerse todo lo que el usuario escriba.

Las personas siguen a otros usuarios, para lo cual no se requiere autorización, y buscan que otros usuarios los sigan (seguidores). Una vez que se identifiquen las personas de interés, tan sólo es necesario oprimir el botón “seguir” y en adelante los comentarios del usuario al que se sigue aparecerán en la pantalla principal o línea de tiempo; en otras palabras, en el timeline van apareciendo los diferentes tweets de los usuarios a los que se siguen.

La interacción en Twitter se da de varias maneras:

• Al responder al tweet de otra persona, lo cual se convierte en una mención a quien se le responde y aparecerá en el timeline de quienes siguen a ambos interlocutores.
• Mediante un retweet (retwittear, retuitear o RT), cuando un usuario considera que lo dicho por otro puede ser de interés para sus seguidores y por tanto se los reenvía o referencia.
• A través de Direct Messages (mensajes directos o DM), que sólo pueden ser enviados entre usuarios que se siguen mutuamente y son privados, no pueden ser vistos por nadie más.

Existen algunas otras funcionalidades en Twitter que resultan atractivas, como el uso de etiquetas conocidas como hashtags (o HT) para referirse a un tema, para lo cual los usuarios incorporan en el tweet una palabra antecedida por el símbolo #, de manera que con tan sólo hacer clic sobre el hashtag aparecerán todas las referencias al mismo (ej. #EventoBID). Ésta es, a su vez, una forma rápida de hacer una búsqueda específica, para lo cual también puede utilizarse el buscador de Twitter (http://twitter.com/search), una herramienta que se ha convertido en uno de los principales buscadores junto con Google y YouTube, y su éxito radica en que permite conocer qué se está diciendo en un momento determinado alrededor de un tema, persona, organización, producto o marca.

Una práctica que sucede en Twitter es que usuarios creen perfiles falsos (conocidos como fake) de personajes reconocidos, a manera de burla; Twitter tiene una política clara al respecto: deben estar claramente identificados como fake en la bio (descripción corta del perfil) o en caso contrario, con sólo reportarlo Twitter lo dará de baja. Existe también, para las figuras públicas, organizaciones o marcas reconocidas, la opción de tramitar ante Twitter la distinción de un perfil como una cuenta verificada, que garantiza que quien dice ser una cuenta, efectivamente lo es.

Al igual que con Facebook, la interacción puede darse más allá de la red misma, agregando en un sitio Web o blog un botón para promover que un usuario sea seguido en Twitter, la posibilidad de twittear un contenido que se esté leyendo o incorporando un seguimiento en tiempo real de los tweets de un usuario determinado o de un #hashtag, esto último muy utilizado también en eventos a través de una pantalla donde se transmiten los mensajes en tiempo real a los asistentes.

Si bien el uso más simple de Twitter es el de redistribuir, mediante enlaces, contenidos o notas de prensa que están alojados en un portal, el potencial de esta herramienta está en la interacción con las personas, conversar con ellas, resolverles dudas o recibir sugerencias.