Es la red social de perfiles profesionales alrededor del mundo. Como en el caso de Twitter, esta red tiene un peso de significancia no proporcional a su masa de usuarios, con un crecimiento del 85% interanual en Latinoamérica. Fundamentalmente esta red ofrece un lugar donde poner el currículo de la persona y formar una red de contactos profesionales, más que de amistad. Permite a su vez que otros destaquen las habilidades y capacidades de una persona, a través de recomendaciones. Cuenta con grupos a los que las personas pueden hacerse miembros a su elección, según afinidad con los temas. Y permite integrar el usuario de Twitter, para compartir las actualizaciones en dicha red social.

Para las personas en la función pública implica una valiosa herramienta para mostrar su trasfondo y experiencia, así como el de su entorno político o profesional. Una forma de mirarlo es en contraste con Facebook o Twitter: mientras en éstas se espera acercarse al lado personal de quien ejerce el cargo, LinkedIn da la oportunidad de mostrar los aspectos profesionales. Por esta razón no es una red para acumular contactos y difundir información, sino para seleccionar con qué personas y perfiles asociarse. En un perfil de LinkedIn es tanto lo que dice la experiencia profesional, como la selección de personas que forman parte de su red.

Puesto de forma sucinta, el papel de LinkedIn puede ser menor para la comunicación directa y difusión, pero vital para formar la imagen integral de la persona, especialmente de sus capacidades técnicas.